Una residencia geriátrica para el colectivo LGTBI+

Nada llega sin antes trabajar, nada llega sin que antes muchos hayan trabajado, sacrificado y soportado de todo para que ahora se puedan poco a poco recoger frutos de ese trabajo y sacrificio. La comunidad LGTBI+ ha sido un grupo maltratado y ha trabajado mucho para hacerse visible y para que se respeten sus derechos como cualquier ciudadano, en muchos países aún se sigue maltratado de forma continua, pero en España se ha conseguido mucho, principalmente las personas mayores. Actualmente ya existe una residencia geriátrica especial para personas con preferencias sexuales diferentes, es decir, personas mayores LGTBI+ en Madrid, pero otro ejemplo, es en Catalunya donde se publicóuna guía para garantizar los derechos de las personas LGTBI+ en las residencias geriátricas y así evitar que las personas mayores con orientación sexual diferente no se sientan aisladas o discriminadas.

La batalla para conseguir tener centro geriátrico fue gigante, pero no solo se consiguió tener una residencia geriátrica, sino que además sea pública. La Fundación 26 de diciembre ha tenido mucho que ver en este proyecto y ahora participa contando la historia en el documental "Un hogar sin armarios” donde se cuentan testimonios estremecedores de sufrimiento físico y mental por no poder demostrar realmente quieres eran, por miedo a recibir rechazo, aislamiento o tratamientos para curar una patología inventada. Aunque el trabajo para todo el colectivo gay aún continua poco a poco se puede ir viendo los resultados positivos.

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