Los seremos humanos somos seres sociales por
naturaleza, necesitamos de los demás para sobrevivir y prosperar, necesitamos
interaccionar con el medio ambiente y todo lo que nos rodea. Las relaciones con
los demás generalmente son cordiales y buscan siempre crear vínculos basados en
las reglas aceptadas por el grupo. Sin embargo, el envejecimiento de la población
ha ido cambiando poco a poco a los grupos de personas no porque no quieren
interaccionar con los demás si no porque la situación de salud física o mental
lo pone en una situación social diferente, a menudo los mayores pasan más
tiempo en solitario haciendo que sean más vulnerables a la soledad no deseada y
aislamiento afectando a su salud física y mental.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística
(INE) alrededor de 38.500 personas mayores de 65 años viven solas en Baleares,
lo preocupante de este dato es que no todas las personas mayores quieren vivir
solas en su domicilio, sino que muchas de ellas preferirían vivir con algún
familiar o estar acompañadas, es decir, no estar solas. Según las previsiones
estas situaciones irán en aumento y por lo tanto habrá más casos de soledad no
deseada y aislamiento afectando a la salud física, mental y emocional. Las
personas que están socialmente aisladas tienen más probabilidades de padecer
problemas de presión arterial, enfermedades del corazón, obesidad, función inmunitario-debilitada,
depresión, deterioro cognitivo y más tiempo de hospitalización. La Cruz Roja de
Baleares esta gestionando diferentes servicios ante la administración para
ayudar a las personas mayores y evitar otras situaciones que los pongan en
mayor riesgo. Dentro de los servicios que se está gestionando son el reparto de
alimentos a domicilio, teleasistencia, grupos de voluntarios para que visiten
domicilios y talleres con diferentes actividades. También se pide apoyo a los
vecinos y entorno inmediato para dar la voz de alerta y prevenir situaciones de
mayor riesgo.
información de residencias geriátricas y
centros de día Aquí.