El envejecimiento de la población replantea nuevas formas de convivencia

Aunque las residencias geriátricas a lo largo de los años han ido cambiando el modelo hospitalario a un modelo más hogareño, más centrado en las necesidades individuales de los usuarios  y se sigue avanzando para que se sientan como en casa, los cambios van desde el entorno amable y accesible hasta la comida lo más hogareño y local posible, aún así,  la gran mayoría de ancianos prefiere vivir en su domicilio, sin embargo, en su entorno se enfrentan a otras situaciones como la soledad no deseada y el aislamiento. Actualmente han surgido muchas iniciativas para paliar la soledad no deseada que han dado buenos resultados, la mayoría son actividades fuera de casa para los mayores independientes y para los mayores dependientes servicios de apoyo para actividades de vida diaria, tareas domésticas y acompañamiento.

Otras iniciativas que se han dado en países como Estados Unidos y norte de Europa son lasviviendas colaborativas  (cohousing) es un modelo donde las personas viven en comunidad y comparten espacios y servicios básicos, donde los usuarios tienen privacidad pero también convivencia permitiendo relacionarse, acompañarse, realizar actividades de todo tipo y evitar uno de los grandes males que es la soledad y el aislamiento no deseado.

Durante uno de los viajes gerosistenciales organizados por inforesidencias  a Alemania se hizo una visita a un espacio donde viven y comparten espacios personas mayores, pero no es una residencia geriátrica. Es otro tipo de iniciativas que al final es vivir en comunidad y evitar la soledad.